El sábado 29 de enero del 2011 asistimos a un curso de creación y manejo de blog con Fernando Bernabé, más conocido como Nano en su faceta de humorista gráfico y activista ambiental, noviolento y miembro del grupo del Arca de Murcia, a fin de poder ayudarle a manejar el blog del Arca de Lanza del Vasto.
El curso se realizó durante el fin de semana de conmemoración del 63 aniversario de la muerte de Gandhi, en el que también participamos en distintos actos relacionados con la Noviolencia, como una conferencia de Mario López Martínez, Doctor en Historia. Profesor de Historia Contemporánea en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología.
Bajado de "Polis", Revista Académica de la Universidad Bolivariana.
Michel Ferré, delegado internacional del Arca España y secretario de la asociación Gandhi Internacional procedió a la lectura del siguiente manifiesto:
MANIFIESTO
El 30 de enero, se celebra el aniversario de la muerte de Gandhi; con este motivo, deseamos hoy, rendirle homenaje. Además de ser considerado el padre de la nación india, a Gandhi se le considera también, en el mundo entero, el padre de la Noviolencia moderna.
La Noviolencia, según Gandhi, es, a la vez una filosofía de vida y un proyecto social completo. Consigue armonizar la faceta interior del ser humano (lo que podríamos llamar el “crecimiento interior”) con su faceta exterior, lo que se podría expresar así:
“formo parte de una ciudad, de un tejido social, de un país y de un planeta…y mi presente y mi futuro, el de mis hijos y de mis semejantes son importantes para mí. ¿Qué valores quiero transmitirles? ¿Cómo llegar a un mundo de justicia social y de fraternidad, un mundo pacífico y respetuoso con la Vida?”
Por supuesto, uno se puede dejar fascinar por la sociedad consumista, el poder del dinero y las tecnologías híper-sofisticadas. Pero, por otro lado y a contracorriente, podemos desear vivir
una vida más sencilla, sin tantas sofisticaciones, sin tanto consumismo,
una vida de no explotación, para no crear cada vez más miseria entorno a nosotros,
una verdadera vida, en la cual podamos crecer como personas auténticas, dignas, en paz con nosotros mismos.
Sencillez de vida, solidaridad y búsqueda de una felicidad interior real.
Aunque esta celebración del asesinato de Gandhi pueda sonar como un acontecimiento triste de celebrar, Muerte significa también Herencia, Legado. Aquél día del año 1948, el mensaje de Gandhi se transformó definitivamente en una ofrenda a la humanidad.
Por eso, aquí estamos, hoy, para seguir difundiendo este mensaje de esperanza y sobre todo de razón: el desarrollo económico de los países ricos está agotando los recursos naturales de la Tierra, estamos destruyendo la biodiversidad y estamos produciendo cada vez más hambruna y desequilibrio social.
Necesitamos cambiar de enfoque, cambiar la manera de ver la vida, transformar nuestro presente para cambiar el futuro.
Y para eso, necesitamos despertarnos. Eso significa hacer nuestro el legado de Gandhi y adaptarlo a nuestra situación de hoy día. Eso significa también ser creativos, ser solidarios, actuar en redes en esta situación de transición y de crisis económicas y sociales.
Se suele decir que “otro mundo es posible”, pero, hoy día, es más bien “otro mundo es necesario”, un mundo más fraternal en que la Noviolencia sea el centro de gravedad, la base firme de la Humanidad, y por encima de todo, en que pasemos de una sociedad infantil a una sociedad, por fin, más adulta.
La Noviolencia, según Gandhi, es, a la vez una filosofía de vida y un proyecto social completo. Consigue armonizar la faceta interior del ser humano (lo que podríamos llamar el “crecimiento interior”) con su faceta exterior, lo que se podría expresar así:
“formo parte de una ciudad, de un tejido social, de un país y de un planeta…y mi presente y mi futuro, el de mis hijos y de mis semejantes son importantes para mí. ¿Qué valores quiero transmitirles? ¿Cómo llegar a un mundo de justicia social y de fraternidad, un mundo pacífico y respetuoso con la Vida?”
Por supuesto, uno se puede dejar fascinar por la sociedad consumista, el poder del dinero y las tecnologías híper-sofisticadas. Pero, por otro lado y a contracorriente, podemos desear vivir
una vida más sencilla, sin tantas sofisticaciones, sin tanto consumismo,
una vida de no explotación, para no crear cada vez más miseria entorno a nosotros,
una verdadera vida, en la cual podamos crecer como personas auténticas, dignas, en paz con nosotros mismos.
Sencillez de vida, solidaridad y búsqueda de una felicidad interior real.
Aunque esta celebración del asesinato de Gandhi pueda sonar como un acontecimiento triste de celebrar, Muerte significa también Herencia, Legado. Aquél día del año 1948, el mensaje de Gandhi se transformó definitivamente en una ofrenda a la humanidad.
Por eso, aquí estamos, hoy, para seguir difundiendo este mensaje de esperanza y sobre todo de razón: el desarrollo económico de los países ricos está agotando los recursos naturales de la Tierra, estamos destruyendo la biodiversidad y estamos produciendo cada vez más hambruna y desequilibrio social.
Necesitamos cambiar de enfoque, cambiar la manera de ver la vida, transformar nuestro presente para cambiar el futuro.
Y para eso, necesitamos despertarnos. Eso significa hacer nuestro el legado de Gandhi y adaptarlo a nuestra situación de hoy día. Eso significa también ser creativos, ser solidarios, actuar en redes en esta situación de transición y de crisis económicas y sociales.
Se suele decir que “otro mundo es posible”, pero, hoy día, es más bien “otro mundo es necesario”, un mundo más fraternal en que la Noviolencia sea el centro de gravedad, la base firme de la Humanidad, y por encima de todo, en que pasemos de una sociedad infantil a una sociedad, por fin, más adulta.
